Reciclado químico
Debido a las limitaciones del reciclado mecánico de los colchones, cada vez se prefiere más el reciclado químico o se utiliza para complementar el reciclado mecánico. Con el reciclaje químico se consigue mejor el suprarreciclaje (del inglés «upcycling») y la circularidad. En el suprarreciclaje los componentes de los colchones son de mejor calidad después del reciclaje. Los componentes pueden utilizarse para fabricar nuevos productos de alta calidad que tengan un valor igual o superior. Durante el proceso de reciclaje químico, las sustancias se descomponen en los componentes originales utilizados para su fabricación: polímeros e incluso monómeros. Los polímeros que se obtienen de este modo tienen la misma pureza que los sintéticos originales. Sin embargo, los polímeros deben mezclarse a veces con nuevas materias primas, ya que el rendimiento del reciclaje químico suele ser inferior al 100 %. Aun así, esto produce una huella de CO2 significativamente menor, porque se utilizan muchas menos materias primas fósiles. Las tecnologías de reciclaje químico se están desarrollando cada vez más para poder reutilizar la espuma de poliuretano y otras espumas procedentes de colchones desechados. Pero como un colchón se compone de múltiples materiales, es necesario un mayor desarrollo. Por ello, se están dedicando muchos esfuerzos a optimizar las tecnologías de reciclaje químico. A continuación, se explican algunas tecnologías de reciclaje químico, sin entrar en detalles, con el fin de que se comprenda mejor el funcionamiento del reciclaje químico.